En el pasado le he preguntado a personas particulares el por qué son de un partido o del otro. He aquí algunas de las respuestas recibidas:
¿Por qué eres Popular?
- “Porque no quiero ser Estado. Después nos obligan a hablar inglés.”
- “Porque mi familia siempre ha sido Popular. Mis papás son Populares. Mis abuelos eran Populares.”
- “Porque todos los PNP son unos corruptos.”
¿Por qué eres PNP?
- “Porque quiero la Estadidad. Somos una colonia.”
- “Porque el ELA es un estatus obsoleto.”
- “Porque los Populares atrasan al país.”
Por otra parte, le he preguntado a algunos que han vivido en Estados Unidos el por qué son de un partido o del otro. He aquí algunas de las respuestas recibidas:
¿Por qué eres Republicano?
- “Porque creo que los impuestos (contribuciones) deben ser equitativos para todo el mundo. Y creo que los salarios los debe establecer el mercado libre.”
- “Porque creo que el presupuesto militar debe ser más alto.”
- “Porque creo que los planes médicos deben ser todos privados, sin intervención del gobierno.”
¿Por qué eres Demócrata?
- “Porque prefiero menos restricciones en la inmigración.”
- “Porque creo que la cubierta medica debe ser universal, provista a todo el mundo.”
- “Porque prefiero más regulaciones del gobierno en asuntos como la protección del consumidor.”
¿Notan alguna diferencia? Mientras las líneas partidarias en Estados Unidos corren por políticas de asuntos como impuestos, salud pública, inmigración, control de armas, y otros temas de interés social… las diferencias aquí no tienen nada que ver con eso.
Por esa razón nuestra política es como es, y nuestras elecciones son como son. Están basadas en:
- Preferencia de estatus – (Boletín: La Estadidad no la exige Puerto Rico y ya. La otorga los Estados Unidos.)
- Historial familiar – (ay bendito…)
- Acusaciones de corrupción – (Boletín: Hay políticos corruptos en AMBOS bandos.)
- “A quien le toca ahora” – (El famoso “sube-y-baja” interminable del cual he escrito en pasados artículos.)
Los refiero a varios artículos que he escrito en el pasado y hoy en día aplican más que nunca. Entre ellos:
- “Política” – dic 2018
- “Rehenes” – ene 2019
- “¡Desmantelen el PNP y el PPD!” – jul 2019
Importa poco que el porciento de votantes en Puerto Rico históricamente sea más alto que en Estados Unidos. Algunos lo ven como un dato merecedor de orgullo. Yo digo de qué vale tener más gente votando, si las premisas por las cuales votan y la forma de votar (la opción del voto íntegro debe desaparecer) dejan mucho que desear.
Amigo Rey, como siempre, excelente articulo. El elemento político que más daño hace en PR es el llamado voto íntegro, el cual, representa el mayor número en cada elección. El mismo tiene su origen en aquellos tiempos en los que el analfabetismo dominaba al país. Por eso se le enseño a la gente a votar por símbolos y con una cruz, que era la manera que los empleados y peones de finca firmaban la lista. Que hoy en día se siga haciendo es vergonzoso, pero, ahí está. Eliminémoslo. Obliguemos al pueblo a votar, no por símbolos ni fotos (sí, porque aquí también se vota por la más linda o el más lindo) y comencemos a votar por individuos. Aquí la gente no se sabe ni los nombres de los senadores o secretarios o peor, no se los aprenden hasta que no se les relaciona con alguna controversia. Mis dos centavos!
Y muy valiosos esos dos centavos, mi amigo Justin. Sabes que estamos totalmente de acuerdo con lo del voto íntegro. ¡Qué mecanismo del voto anticuado, obsoleto, y dañino a la vez! Es como los requisitos para ser alcalde o legislador que a la fecha de hoy, siglo XXI, increíblemente solo requieren “saber leer y escribir.” Qué pena que no ha venido un gobernador “con los pantalones bien puestos” (por no usar la frase callejera) y se haya dedicado a reformar las leyes electorales que tan necesitadas están. Seguimos con las viejas costumbres de siempre, y nadie le mete mano a aquello que desesperadamente hay que arreglar. ¡Gracias por tus comentarios!
los boricuas muchos de estos son unos mantenidos le gusta el dinero,fiestas,beneficios pero en esta era moderna muchos no les importan verdaeramente el “status colonial” y mientras reciban beneficios se mantendran ajenos a resolver este tranque politico y continuaremos en ambivalencia politica. Cuando el pueblo se levante fuera de colores politicos y fanatismo y exija que los lideres politicos se ajusten y pongan a trabajar por el pueblo esto cesara, pero cada cual esta por su beneficio social,politico y nada mas. La sociedad moderna ha roto el parametro de la justicia social, igualdad, respeto humano por los demas y son como los adolescentes que adolecen de madurez mental para arriesgarse a tomar decisiones politicas de embergadura y responsabilidad y asi continuaremos obligados por el gobierno de turno ha ser mantenidos por asistencias federales a diestra y siniestra. La isla es un pais pobre en extremo y asi lo vemos diariamente solicitando dinero para esto o aquello para ayudar al necesitado pero estos se mantienen en la pobreza y es una verguenza que como pueblo unido no obligemos a resolver y eliminar la pobreza en nuestra isla.
Saludos José Ignacio, y gracias por sacar el tiempo para comentar. Se ve que le has dado mucho pensamiento al asunto. Lo que dices sobre los muchos boricuas que “son unos mantenidos”, lamentablemente es una de esas verdades que a nadie le gusta escuchar, pero es cierto. Sea por la razón que sea, hay un sector de la población que de lo que está pendiente es quién le va a dar más… o quién le va a otorgar más beneficios.
Hasta que no veamos las cosas como son, no vamos a echar pa’lante. Los colores políticos y el fanatismo es un mal del cual he escrito muchas veces en este “blog”, y en realidad fue mi razón primordial por comenzar el mismo hace año y medio atrás. Mi única frustración es no poderle llegar a más personas con mi mensaje, por lo cual me agrada ver comentarios como los tuyos.
El talento humano y calidad humana la hay. Eso nadie lo contradice. Sin embargo hace falta un liderato atrevido, fuerte, y dispuesto a pensar “out of the box”, o fuera de los parámetros a los cuales hemos sido esclavizados por largas décadas de oportunistas cogiendo su turno en uno de los dos partidos nauseabundos que hace tiempo no tienen razón de existencia.
Mi pregunta sigue siendo, ¿Cuánto tiempo más vamos a permitir nosotros los ciudadanos trabajadores y responsables, con un sentido de lo que es correcto… cuánto tiempo vamos a permitir que este sector de la población sin orgullo propio o una visión para el futuro nos mantenga presos, o rehenes (otro artículo de mi “blog”) al mismo ciclo vicioso de cada cuatro años?