Un norteamericano se me acercó hace un par de años y me preguntó sobre la manera apropiada de manejar un carro en Puerto Rico. Me indicó que quería hacerlo como todo el mundo, porque no quería pecar de hacer las cosas mal y causar algún accidente. Le dije que no se preocupara, que yo le iba a decir todo lo que tenía que saber.
Procedí a darle unas reglas básicas a seguir.
Luz roja – La misma es indicativa que pueden pasar cinco carros más. Todos sabemos que el otro lado no tiene luz verde hasta que no prende la roja para uno. Considerando el tiempo de reacción de los detenidos para arrancar, ya el puertorriqueño ha calculado que luego de la roja tienen tiempo para cinco carros más. De por alguna razón detenerte en la roja, corres el riesgo de ser impactado por uno de esos cinco carros que vienen a comerse la luz.
Paseo – Este es el carril adicional usado para ganar tiempo en el tapón o tráfico pesado. Obviamente, si ves una patrulla más adelante, te metes a la cañona al carril derecho y aquí no ha pasado nada. Cuando te aproximas a una luz que está roja y vienes por el paseo, si lo “taimeas” correctamente, llegas cuando está cambiando a verde y eres el primero en la fila. Si tienes una emergencia y tienes que detenerte, usa la grama después del paseo, no vaya a ser que te impacten.
El aguaje de doblar a la derecha – En intersecciones donde la luz está roja, como hay una ley que puedes virar a la derecha con la roja, haces el aguaje que vas a virar a la derecha y rápidamente haces un viraje en “U” con el único propósito de comerte la luz. Funciona a las mil maravillas.
Los “solos” para doblar a la izquierda – Algunas veces la fila es muy larga en el solo. Lo que haces aquí es hacer un nuevo solo temporero en el carril izquierdo, pegándote al primer carro del solo para que sepan que vas a doblar. Los que vengan detrás tienen que entendérselas cambiando de carril. Como cortesía puedes poner la señal. Si eres diestro, puedes usar el solo igual que el paseo, “taimeando” la luz roja para que cuando cambie a verde, eres el primero en la fila. Ibas a virar, pero cambiaste de opinión.
“Bloquear” las intersecciones cuando hay tapón – Si estas en un tapón y llegas a una luz que se pone amarilla, sigue pa’lante y pégate al carro del frente. Si dejas un espacio para que el otro tráfico cruce, va y se te mete alguien al frente. Mejor pégate al del frente, aunque se tranque la intersección.
Luz roja después de medianoche – Te la puedes comer en confianza. Aparentemente dicen que pasaron una ley hace mucho tiempo que, con las debidas precauciones y en sitios que lo ameritaba (si no había nada de tráfico), podías proceder con cautela si era más de medianoche. Pa’ que fue eso. Ahora es en todas las luces, como si estuviera verde. Así que procura no parar en una luz roja después de medianoche a no ser que te impacten como en la regla número 1.
Doble “parking” – Aquí es permitido. Dicen que no, pero lo es. En otras palabras, si tienes que estacionarte y no hay “parking” cerca, puedes bloquear otro carro. Cualquier cosa que cuando regreses encuentres al dueño del carro que bloqueaste molesto, le tiras un “ay bendito” y sigues pa’lante.
Destrezas a dominar – Cortes de pastelillo, cañonear, zigzaguear, uso correcto de la bocina (ejemplo: 0.001 segundos después de la luz tornarse verde).
Los otros días me encontré con el norteamericano, que había mejorado mucho el español, y me dijo, “¡Chacho mano! Gracias por las sugerencias que me diste. Estoy hecho un verdadero puertorriqueño en la carretera mi hermano. Te lo debo a ti.”
Me dio la mano y se fue. Yo seguí mi camino, otro acto samaritano completado.
🤣🤣🤣🤣🤣🤣 me muero!!! Yo pensé la ley de la luz roja era que te la podías comer luego de las dos am…🤷🏻♀️
La realidad es que no existe tal ley de doblar a la derecha con luz roja. Eso se ha convertido en regla cultural. Falto mencionarle al americano que debe conocer el lenguaje de señas apropiado para comunicarle su “entusiasmo” a los otros choferes. En adición el uso de las luces de emergencia o “hazards” para hacer caravanas o cuando llueve. Como siempre, amigo Rey, excelente!
Gracias por tu comentario, Lissie. La realidad es que la Ley Núm. 22 del 2000 indica que los conductores se pueden “comer” la luz entre doce de la noche y cinco de la mañana, siempre y cuando reduzcan la velocidad y “se tomen las debidas precauciones.” Obviamente interpretado por parte del público conductor como permiso para comerse las luces como si no existieran. Definitivamente una ley que deben reconsiderar, porque se presta para abuso craso.
Saludos Justin, y gracias por tu comentario. Lo cierto es que sí existe la ley para doblar a la derecha. La Ley Núm. 22, Artículo 8.02, Sección b(3), permite el viraje a la derecha con luz roja desde el carril de extrema derecha. Algo que el puertorriqueño ha perfeccionado en el arte del aguaje de doblar para luego hacer un viraje en “U” y hacer otra derecha para seguir su camino… todo el tiempo pensando “que listo soy.” Pero es increíble cómo se me había olvidado decirle al norteamericano sobre las luces de emergencia. Por eso dicen que dos cerebros piensan más que uno. ¡Gracias por recordármelo! Al diablo con el uso para el cual fueron diseñadas las luces de emergencia. ¿Está lloviendo? ¡Vamos a prenderlas! De esa forma el pobre conductor que esté parado en el paseo por un desperfecto del carro con las luces de emergencia puestas, se puede confundir fácilmente por otro que viene bajo la lluvia y queriendo usar el “carril” del paseo. ¡Qué sorpresa para ambos!