Bueno, haciendo un resumen sobre los artículos que hasta ahora he escrito bajo la categoría de “Mejorando a Puerto Rico.” Primero escribí sobre la cultura, y como a veces pecamos de achacarle a nuestra cultura algunas de las fallas que como pueblo tenemos hoy en día. Luego toqué un tema favorito mío, la basura. Quizás un “leve detalle” dentro de nuestras preocupaciones diarias, pero sintomático de los aspectos donde podemos mejorar como pueblo. El por qué tiramos la basura a la calle aquí, pero no nos atrevemos hacerlo en ningún otro país que visitamos. De ahí seguí con la política, cuestionando el por qué a estas alturas necesitamos estos dos partidos (PNP y PPD) alternándose en el poder y manteniéndonos en un limbo sin progreso. Como rehenes, se puede decir, el cual fue el tema de mi cuarto artículo.
Lo seguí con “El Arte de Copiarse”, donde propongo que en vez del orgullo falso, usando el eslogan “Puerto Rico lo hace mejor”, pudiéramos coger ejemplos de cómo hacen las cosas en otros países. Finalmente, el más reciente artículo fue sobre cómo mover la economía de Puerto Rico, y pensar fuera del cajón (“out of the box”).
Un amigo mío me dijo una vez, “al puertorriqueño no le gusta que lo critiquen.” Yo le contesté que yo soy tan puertorriqueño como cualquiera, y utilizo críticas constructivas para mejorar cada día más. El no aceptar críticas constructivas de por sí es un fallo, y conlleva al nunca mejorar, porque te quedas en la complacencia de “Puerto Rico lo hace mejor.”
Por eso hice este “blog.” Es frustrante ver los mismos fallos día tras día. El pasar por el mismo ciclo interminable de las elecciones cada cuatro años, sabiendo que vamos a volver a lo mismo no importa cual gane… el rojo o el azul. El hablar con personas inteligentes, pero que a la hora de tomar acción, simplemente carecen de las energías o el interés de hacerlo.
Vendrán más artículos en esta categoría. Claro, también seguiré escribiendo sobre temas de interés actual, tanto aquí como en Estados Unidos y el extranjero. Seguiré escribiendo sobre temas variados, como el deporte, el cual es una de mis pasiones, y otros temas. Pero la razón principal del “blog” sigue siendo la crítica social de Puerto Rico.
Hace muchos años atrás, acabando de mudarme a Puerto Rico desde Estados Unidos con mi familia, recuerdo haber leído en un periódico local una Carta de Lector donde esta persona criticaba la manera en que manejaban carros en Puerto Rico. Este lector era un norteamericano, quien había vacacionado en Puerto Rico y quedó impactado en cuanto a cómo manejaban en las carreteras de Puerto Rico. Pero el tono de la carta publicada en el periódico era tan despectiva, que tuve que responder. Por suerte, me publicaron mi carta también en el mismo periódico. En la contestación le indiqué que yo había vivido en Estados Unidos, y en ciertas ciudades guiaban tan malo como aquí. De una vez le dije que no era apropiado criticar de forma tan despectiva. De que la persona tuviese razón o no, esos son “otros veinte pesos”, como decimos nosotros. Fue la forma de expresarse.
Con eso quiero decir que yo me siento en la libertad de criticar cosas de mi isla, claro… de forma constructiva. Pero lo hago con las mejores intenciones, y entiendo que tengo derecho, siendo yo puertorriqueño también.
En mi opinión existe un alto nivel de apatía. Entiendo que hay muchas razones por eso. El ciudadano promedio tiene bastantes asuntos personales de los cuales preocuparse para interesarse o envolverse en asuntos que tienen que ver con la isla en general. Es de entenderse. El trabajo, los niños, la escuela, las presiones diarias. Todo esto promueve el sentido de apatía en cuanto a las cosas que tienen que ver con nuestra sociedad y nuestro país. Otro factor es la cantidad de tiempo que hemos estado en estas condiciones. Quejarse del sistema político es tremendo pero… es el sistema que hemos tenido por largas décadas. La inercia está a favor de los políticos. Lamentablemente otro factor es el pensamiento de que, “después que no me toquen lo mío….” Digo lamentable porque es lo que nos pone gríngolas y no nos deja ver el panorama en su totalidad. Estamos tan enfocados en nosotros mismos, que difícilmente vamos a poner atención cuando alguien está hablando del estado del país.
Finalmente, y como también le dije a aquel amigo que me dijo que al puertorriqueño no le gusta que lo critiquen… si todos tuviéramos la misma actitud de querer mejorar continuamente (otro tema tocado en otros de mis artículos)… colectivamente estuviéramos mucho mejor.
¡Seguimos con los artículos!